Y cuando menos te lo esperas...

Esta va a ser una entrada un poco corta, que debería de estar estudiando, pero es que el cuerpo me pide escribir.

Nunca habéis perdido unas llaves ¿verdad que no? y tras horas y horas de búsqueda, después de que hayan pasado meses, nochevieja, tu cumpleaños, han nacido tus dos maravillosos hijos... y el día de la graduación universitaria del pequeño, debajo del montón de la ropa sucia... aparecen las llaves.

La historia de nuestra vida, la de tiempo que nos hemos pasado buscando cosas que no hemos encontrado y cuando tenemos la cabeza en otra cosa, aparecen.

Esto pasa con todo: objetos, amistad, trabajo, amor...

Mucha gente que me rodea está en esa situación de búsqueda continua por un motivo o por el otro, yo sin ir más lejos estaba en esa situación hasta hace bien poco; a esta gente les digo, dejad de buscar y empezad a disfrutar de la vida, si continuamente estáis buscando no vais a ser vosotros mismos y la gente que os rodea lo nota, porque siempre vais a tener ese run run en la cabeza de me falta esto o lo otro... y no vais a disfrutar de lo que os rodea que es como yo creo que se está a gusto consigo mismo.

Con este último párrafo no quiero decir que os sentéis en el sofá a esperar a que las cosas ocurran ni mucho menos, creo que todo el mundo sabe que hay cosas que hay que trabajarselas y dedicarlas tiempo por ejemplo: si no sales de casa, nunca vas a conocer a gente nueva y si no estudias no vas a aprobar nunca (a menos que estudies...), pero a lo que yo me refiero es a no estar desesperado por ello... entrándole a todas las tías de la discoteca ni estando 24/7 en la biblioteca, porque te volverías loco.

Y cierro con un... y cuando menos te lo esperas...encontrarás tus llaves.

P.D: no seáis malos conmigo.

P.D2: por cierto, empiezo exámenes por lo que a menos que vaya anunciar que me cuelgo, no creo que escriba mucho hasta agosto y será la crónica del campamento (si al final hay) que promete, como todos los años ser... LEGENDARIO !!